martes, 8 de noviembre de 2011

Todavía se nos espera tras el descanso frente a Adesavi


Si siempre hay que quedarse con lo bueno, podemos decir que el domingo por la mañana en San Vicente del Raspeig hicimos 20 minutos buenos (los primeros) y viniendo de 40 minutos horrorosos en casa frente a Guardamar es un paso adelante, pero con qué mal sabor de boca nos fuimos.

Con la lección bien aprendida tanto atrás como delante salimos concentrados para no cometer errores o bien si los cometíamos que no pudieran castigarnos por ellos. Jugamos en equipo con equilibrio entre interiores y exteriores, aportando todos nuestro granito de arena.

Pero tras el descanso se apagó la luz. Y eso que nuestro rival hasta mitad del tercer periodo no se mostró muy acertado de cara al aro conservando una renta de 10 puntos que era engañosa. Comenzamos a "no atacar" y en vez de ponernos las pilas desde atrás, defendiendo más inténsamente nos olvidamos de "agachar el culo" por lo que la remontada del equipo alicantina no tardó en producirse.

Al último cuarto, aun  llegamos con una mínima ventaja y a falta de 5 minutos para el final ganábamos de 2 (por muy extraño que parezca), todo debido a la inspiración individual que murió en ese preciso momento. Todo lo demás se veía venir. Ellos anotaron casi en todas sus posesiones; incapaces de parar sus penetraciones (que siempre acababan en canasta o personal), nos colocamos en zona 2-3 para que en dos posesiones nos "enchufaran" un par de triples que prácticamente sentenciaban el partido.

La última jugada reflejó la tendencia final del encuentro. Tras un tiempo muerto que pidió Pablo y el partido resuelto, buscamos reducir la renta que era de 9 puntos (por un futuro e hipotético basket-average de cara al final de temporada) a falta de unos 14 segundos. Íbamos a realizar nuestro sistema de banda a no ser que nos defendieran en zona (que fue lo que ocurrió). Pues bien, en tan solo 5 segundos perdimos el balón, cruzaron la pista, se pasaron un par de veces la pelota y en el último segundo anotaron un triple con varios jugadores de nuestro equipo con la cabeza agachada en pista delantera (entre los que me incluía).

Si Mario, esa actitud es incomprensible, aunque el partido estuviera perdido de antemano. Supongo que yo al menos sentía rabia por el encuentro que se nos había escapado de las manos sin saber porqué. Lo que ante Guardamar fue un quiero y no puedo que conllevó la bajada de manos a falta de 10 minutos para el final, frente a Adesavi se repitió en esta última jugada (después de haber demostrado ser algo parecido al "Dr. Jecklin and Mr. Hyde").

Lo que luego ocurrió en el vestuario suele ser normal, aunque deberíamos mordernos la lengua, sobre todo en caliente e intentar realizar críticas constructivas y positivas por muy difícil que parezca en esos momentos. Fríamente, sabemos que el objetivo del equipo es la salvación (y para ello entrenamos). Tras dos victorias iniciales todos pensamos en algo más (y el que diga lo contrario miente), de hecho yo, e imagino que todos mis compañeros, jugamos para ganar todos los partidos sin pensar en que ningún rival es mejor que nosotros y si lo es, que lo demuestre en el campo. Y viendo cómo nos está yendo, hemos de ser positivos y realistas sabiendo que podemos competir contra cualquiera, pero para ganar hemos de estar concentrados, entrenar sin reservarnos nada y aportar todos en la medida de nuestras posibilidades. En definitiva, caminar todos por la misma senda.

El próximo fin de semana tenemos una buena oportunidad para resarcirnos de estas dos derrotas consecutivas. Nuestro rival será La Vila (Villajoyosa), que ocupa la última posición con 4 derrotas por ninguna victoria, en nuestra casa y ante nuestra afición.

Será un buen momento para que todos rememos hacia el mismo objetivo que no es otro que la victoria, que disfrutar ganando y jugando al baloncesto, ese deporte que tanto nos gusta y que cuando queremos, ya hemos demostrado que sabemos practicarlo.

Será un buen momento para que Kike y Salva dirijan al equipo con confianza, haciendo saber al equipo que ellos dominan el ritmo del partido que más nos conviene. Será un buen momento para que Larry siga "enchufando" con continuidad y se deje la piel en defensa (como al principio de temporada); para que Mario coja galones, que tiene de sobra, a pesar de que el otro día no lo pudo demostrar debido a los pocos minutos de que dispuso; para que Juanje siga progresando y ayudando al equipo, no solo en defensa, sino también en ataque, ya que está de sobra capacitado; para que yo no sea como el Guadiana y me muestre más regular durante todo el partido ejerciendo de líder en pista cuando sea necesario que para eso estamos. Será un buen momento para que Manu vaya cargando pilas y aporte al equipo lo que todos esperamos de él (polivalencia); para que David se dedique a jugar (que sabe de sobra), ya que cuando lo hace todos lo notamos para bien y se deje de "broncas" con el resto de compañeros; para que Santi vuelva a ser el "soul team" (alma del equipo) y nos reflejemos en él; para que el pobre Rubén, que el otro día no jugó demuestre su calidad y saque los dientes de una vez, que solo así se va a ganar el respeto de compañeros y rivales en la cancha; para que Silverio siga cerrando bocas y pueda completar un buen partido en todas las facetas. Para que Octavio se recupere de una vez, el otro día lo echamos de menos. Será un buen momento para que Pablo no pierda la fe en nosotros y siga con ilusión, confiando en todos y cada uno de los miembros del equipo (todos podemos y debemos aportar, como he dicho antes en la medida de nuestras posibilidades y eso es lo que él nos debe exigir).

En una futura entrada hablaré del "PARTIDAZO" que jugó Autocares Mellizo el domingo por la tarde frente al Molina Básket y finiquitaremos el tema CD para los calentamientos con alguna sorpresa final.

1 comentario:

  1. Por cierto el cumpleaños de Vladi se acerca así que los miembros del CEDA que se preparen para un sábado movido (día 19 de octubre)

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